Inversiones con Propósito: Más Allá de los Rendimientos Financieros
Por:
Jonathan Ceja Aguilera
CO – Founder & CEO KUN Capital
La palabra INVERTIR significa cambiar el orden, la dirección o posición de una cosa por los opuestos, también significa emplear una cantidad de dinero en un proyecto o negocio para conseguir ganancias. Combinando ambos significados propios de la palabra podemos obtener una definición más robusta y completa, ya que cada inversión es única, tiene sus propias características, oportunidades y riesgos, así como su potencial rendimiento.
En el mundo de las inversiones, siempre a un mayor riesgo, se espera un mayor rendimiento, aunque éste no esté garantizado. Es sumamente importante que nosotros, como inversores, realicemos una investigación previa para determinar ¿qué tipo de inversión se ajusta a nuestro perfil de riesgo, a nuestros objetivos y horizonte? Con estas tres respuestas a las preguntas básicas, realizaremos inversión inteligente que, seguramente, alcanzará e incluso superará nuestras expectativas.
En este blog analizaremos cinco tipos diferentes de inversión, su relación con el riesgo que se asume, así como el tipo de rendimiento potencial:
- Donaciones
Las donaciones, para KUN Capital, son inversiones, inversiones en una organización sin fines de lucro que buscan conseguir apoyo para financiar proyectos personales o simplemente tratan de ofrecer ayuda a la comunidad para cubrir gastos médicos, educación u otro servicio del que carecen. El objetivo principal es altruista.
Hay empresas que se dedican a la recaudación de fondos que se ajustan bien a cada necesidad tanto del inversionista y/o donante como del donatario. El retorno del capital, así como el rendimiento de la inversión en las donaciones no es medible en dinero, sino en la satisfacción personal desde el día uno de la contribución y su retorno esperado es el impacto positivo que generó nuestra inversión.
- Invertir con recompensas
Las recompensas son la ganancia en dinero o especie devuelta por una inversión en la cual no necesariamente veremos el retorno del capital invertido, el mejor ejemplo es la inversión en la educación de nuestros hijos. La recompensa final es ver el desarrollo de nuestras hijas o hijos tanto académica como emocional y social.
Para generaciones anteriores, como los “Baby Boomers”, quienes sus padres tuvieron muchas dificultades por ver a un hijo titulado, el vernos con un título universitario es una de las mayores recompensas de la “inversión de su vida”.
En los dos ejemplos anteriores, de tipos de inversión, existe un gran riesgo que no es controlable, ya que no depende directamente de nosotros y, por el horizonte de inversión de muy largo plazo, están expuestas a muchas coyunturas que desconocemos. El riesgo, en sí mismo, no es algo malo, aunque culturalmente implica miedo. En el sector financiero, el riesgo puede significar pérdida, oportunidad o incertidumbre, depende de la óptica del inversor. La regla general es que debemos considerar al riesgo siempre en medida del potencial del retorno que buscamos en nuestras inversiones y el tiempo que estamos dispuestos a esperar.
- Inversiones de Capital (Equity)
Las inversiones en Equity, capitales o acciones, son la forma más común de inversión actual. En KUN Capital promovemos que nuestras inversiones estén, en su mayoría, respaldadas por acciones de la empresa que recibe la inversión. Esto significa que el inversionista se vuelve socio y por lo tanto dueño de una participación de la empresa.
Este tipo de inversiones ofrecen la oportunidad de lograr mayores rendimientos en un mayor plazo. Como analogía pondré el “hornear un pastel”: Cada ingrediente es un conjunto de acciones, sin embargo, los accionistas sólo podrán comerse el pastel hasta que esté horneado. ¿Qué pasa con el riesgo? Si no esperamos a que todos los ingredientes se agreguen al pastel o le mordemos antes de que esté listo, pudiera no resultar satisfactorios, por otro lado, si seguimos la receta al pie de la letra y nos esperamos todos a que el pastel esté listo, al comerlo, todos tendremos una rebanada justa y equitativa. Estas inversiones siempre apuntan al éxito del proyecto y/o empresa.
- Inversiones de Deuda
Las inversiones en deuda son préstamos, ya sea a una persona o una entidad a cambio de flujos constantes, llamados intereses, o bien del retorno de nuestro capital invertido más la suma de los intereses totales generados en un periodo determinado. Aquí hay muchos ejemplos, desde las tandas, que son préstamos, pagarés bancarios y los más conocidos por los inversionistas con experiencia, los CETES.
El riesgo en las inversiones de deuda radica en el incumplimiento del acreedor (quien recibe el préstamo). Es por eso, lo que se menciona al principio de este blog, la importancia de investigar bien, ya que una mala decisión en este tipo de inversión puede resultar en la pérdida de, no sólo los intereses, sino de todo nuestro capital. En KUN Capital consideramos a las inversiones en deuda más riesgosas que las de Equity porque, la mayoría de las veces, no tienen garantía como las acciones.
- Inversiones en Tecnología
En la era digital, las inversiones en tecnología se han convertido en una opción atractiva para la gran mayoría de los inversores, jóvenes y no tan jóvenes. Ya no se trata simplemente de mantenerse a la vanguardia y a la par con la competencia, sino de transformar industrias enteras a través de la innovación tecnológica y financiera. Invertir en tecnología significa invertir en el futuro de nuevas generaciones, invertir en oportunidades de alto rendimiento como startups, criptomonedas, acciones de pequeñas empresas con alto potencial de crecimiento, entre otras.
Las inversiones en tecnologías exitosas, la historia ha demostrado que generan rendimientos excepcionales, también hemos vivido la obsolescencia de diversas tecnologías. En su momento nadie imaginó, ni el propio Blockbuster, quien rechazó comprar a Netflix por USD $50 MM, que éste lo superaría y lo llevaría a la quiebra. Hay más casos: el VHS, el Blue-Ray e incluso la telefonía análoga, tecnologías de punta que hoy son obsoletas.
CONCLUSIÓN:
Es importante tomar con naturalidad que cada tipo de inversión conlleva sus propios riesgos y recompensas. La manera de realizar una inversión inteligente es buscar un asesoramiento financiero, legal y técnico adecuado, estar familiarizado con cada oportunidad de inversión antes de invertir, tener la mayor cantidad de información para que nos ayude a tomar decisiones con mayor seguridad, y la más importante, diversificar.
Al diversificar, la elección de cada inversión, es muy personal, depende de nuestros gustos, objetivos personales y financieros, así como de nuestra tolerancia al riesgo y nuestra paciencia medible en tiempo. Al distribuir nuestro patrimonio en diferentes tipos de inversión lograremos reducir el riesgo total de nuestro patrimonio y generar mayores rendimientos.
Jonathan Ceja Aguilera
CO – Founder & CEO KUN Capital
El Blog de KUN Capital está escrito únicamente con fines informativos y no debe considerarse un consejo de inversión ni una recomendación para comprar, vender o mantener ningún activo en particular.
Inversiones con Propósito: Más Allá de los Rendimientos Financieros
Por:
Jonathan Ceja Aguilera
CO – Founder & CEO KUN Capital
La palabra INVERTIR significa cambiar el orden, la dirección o posición de una cosa por los opuestos, también significa emplear una cantidad de dinero en un proyecto o negocio para conseguir ganancias. Combinando ambos significados propios de la palabra podemos obtener una definición más robusta y completa, ya que cada inversión es única, tiene sus propias características, oportunidades y riesgos, así como su potencial rendimiento.
En el mundo de las inversiones, siempre a un mayor riesgo, se espera un mayor rendimiento, aunque éste no esté garantizado. Es sumamente importante que nosotros, como inversores, realicemos una investigación previa para determinar ¿qué tipo de inversión se ajusta a nuestro perfil de riesgo, a nuestros objetivos y horizonte? Con estas tres respuestas a las preguntas básicas, realizaremos inversión inteligente que, seguramente, alcanzará e incluso superará nuestras expectativas.
En este blog analizaremos cinco tipos diferentes de inversión, su relación con el riesgo que se asume, así como el tipo de rendimiento potencial:
- Donaciones
Las donaciones, para KUN Capital, son inversiones, inversiones en una organización sin fines de lucro que buscan conseguir apoyo para financiar proyectos personales o simplemente tratan de ofrecer ayuda a la comunidad para cubrir gastos médicos, educación u otro servicio del que carecen. El objetivo principal es altruista.
Hay empresas que se dedican a la recaudación de fondos que se ajustan bien a cada necesidad tanto del inversionista y/o donante como del donatario. El retorno del capital, así como el rendimiento de la inversión en las donaciones no es medible en dinero, sino en la satisfacción personal desde el día uno de la contribución y su retorno esperado es el impacto positivo que generó nuestra inversión.
- Invertir con recompensas
Las recompensas son la ganancia en dinero o especie devuelta por una inversión en la cual no necesariamente veremos el retorno del capital invertido, el mejor ejemplo es la inversión en la educación de nuestros hijos. La recompensa final es ver el desarrollo de nuestras hijas o hijos tanto académica como emocional y social.
Para generaciones anteriores, como los “Baby Boomers”, quienes sus padres tuvieron muchas dificultades por ver a un hijo titulado, el vernos con un título universitario es una de las mayores recompensas de la “inversión de su vida”.
En los dos ejemplos anteriores, de tipos de inversión, existe un gran riesgo que no es controlable, ya que no depende directamente de nosotros y, por el horizonte de inversión de muy largo plazo, están expuestas a muchas coyunturas que desconocemos. El riesgo, en sí mismo, no es algo malo, aunque culturalmente implica miedo. En el sector financiero, el riesgo puede significar pérdida, oportunidad o incertidumbre, depende de la óptica del inversor. La regla general es que debemos considerar al riesgo siempre en medida del potencial del retorno que buscamos en nuestras inversiones y el tiempo que estamos dispuestos a esperar.
- Inversiones de Capital (Equity)
Las inversiones en Equity, capitales o acciones, son la forma más común de inversión actual. En KUN Capital promovemos que nuestras inversiones estén, en su mayoría, respaldadas por acciones de la empresa que recibe la inversión. Esto significa que el inversionista se vuelve socio y por lo tanto dueño de una participación de la empresa.
Este tipo de inversiones ofrecen la oportunidad de lograr mayores rendimientos en un mayor plazo. Como analogía pondré el “hornear un pastel”: Cada ingrediente es un conjunto de acciones, sin embargo, los accionistas sólo podrán comerse el pastel hasta que esté horneado. ¿Qué pasa con el riesgo? Si no esperamos a que todos los ingredientes se agreguen al pastel o le mordemos antes de que esté listo, pudiera no resultar satisfactorios, por otro lado, si seguimos la receta al pie de la letra y nos esperamos todos a que el pastel esté listo, al comerlo, todos tendremos una rebanada justa y equitativa. Estas inversiones siempre apuntan al éxito del proyecto y/o empresa.
- Inversiones de Deuda
Las inversiones en deuda son préstamos, ya sea a una persona o una entidad a cambio de flujos constantes, llamados intereses, o bien del retorno de nuestro capital invertido más la suma de los intereses totales generados en un periodo determinado. Aquí hay muchos ejemplos, desde las tandas, que son préstamos, pagarés bancarios y los más conocidos por los inversionistas con experiencia, los CETES.
El riesgo en las inversiones de deuda radica en el incumplimiento del acreedor (quien recibe el préstamo). Es por eso, lo que se menciona al principio de este blog, la importancia de investigar bien, ya que una mala decisión en este tipo de inversión puede resultar en la pérdida de, no sólo los intereses, sino de todo nuestro capital. En KUN Capital consideramos a las inversiones en deuda más riesgosas que las de Equity porque, la mayoría de las veces, no tienen garantía como las acciones.
- Inversiones en Tecnología
En la era digital, las inversiones en tecnología se han convertido en una opción atractiva para la gran mayoría de los inversores, jóvenes y no tan jóvenes. Ya no se trata simplemente de mantenerse a la vanguardia y a la par con la competencia, sino de transformar industrias enteras a través de la innovación tecnológica y financiera. Invertir en tecnología significa invertir en el futuro de nuevas generaciones, invertir en oportunidades de alto rendimiento como startups, criptomonedas, acciones de pequeñas empresas con alto potencial de crecimiento, entre otras.
Las inversiones en tecnologías exitosas, la historia ha demostrado que generan rendimientos excepcionales, también hemos vivido la obsolescencia de diversas tecnologías. En su momento nadie imaginó, ni el propio Blockbuster, quien rechazó comprar a Netflix por USD $50 MM, que éste lo superaría y lo llevaría a la quiebra. Hay más casos: el VHS, el Blue-Ray e incluso la telefonía análoga, tecnologías de punta que hoy son obsoletas.
CONCLUSIÓN:
Es importante tomar con naturalidad que cada tipo de inversión conlleva sus propios riesgos y recompensas. La manera de realizar una inversión inteligente es buscar un asesoramiento financiero, legal y técnico adecuado, estar familiarizado con cada oportunidad de inversión antes de invertir, tener la mayor cantidad de información para que nos ayude a tomar decisiones con mayor seguridad, y la más importante, diversificar.
Al diversificar, la elección de cada inversión, es muy personal, depende de nuestros gustos, objetivos personales y financieros, así como de nuestra tolerancia al riesgo y nuestra paciencia medible en tiempo. Al distribuir nuestro patrimonio en diferentes tipos de inversión lograremos reducir el riesgo total de nuestro patrimonio y generar mayores rendimientos.
Jonathan Ceja Aguilera
CO – Founder & CEO KUN Capital
El Blog de KUN Capital está escrito únicamente con fines informativos y no debe considerarse un consejo de inversión ni una recomendación para comprar, vender o mantener ningún activo en particular.